La "ciencia" de la manipulación

Análisis gráficos, estadísticas y encuestas son métodos matemáticos empleados para analizar tendencias políticas, opiniones, el estado de la economía... Pero las matemáticas son sólo una herramienta y como tal son susceptibles de convertirse en una ciencia al servicio de la manipulación.

Resultado de imagen de estadisticas       Vivimos en la sociedad de la Información, a veces de la sobreinformación incluso. Diariamente nos vemos bombardeados por todo tipo de datos, que llegan a nosotros por multitud de canales (televisión, radio, prensa escrita, Internet y las redes sociales...). Nunca en la Historia hemos tenido acceso a tal cantidad y variedad de datos, de una forma tan rápida y sencilla. Sólo basta un clic del ratón o sacar el móvil, estés donde estés, y conectarse a la Red para dar con la información que buscamos. Recuerdo las clásicas discusiones que tenía con los amigos cuando nos reuníamos a charlar en un bar, que se eternizaban porque no era posible contrastar la opinión de cada uno (nadie iba con una biblioteca bajo el brazo). Hoy eso ya es historia, porque para eso tienes tu conexión 3G o 4G en tu smartphone que te saca de dudas acerca de cualquier cuestión (qué actor protagonizó ésta u otra película, envergadura de alas de un albatros, qué equipo ganó la liga inglesa en 1980...).
Pero que los datos nos inunden no quiere decir que estemos mejor informados. Al contrario, puede que la sobreinformación llegue a repercutir en nuestra capacidad de juicio. Para eso existen determinadas herramientas de gestión de la información, surgidas de la Estadística y las Matemáticas, diseñadas en principio para extrapolar de un conjunto o de la totalidad de los datos disponibles sobre un asunto concreto, una conclusión que se pueda presentar en un formato tal que resulte fácilmente comprensible o asimilable. Muestreos estadísticos, encuestas, gráficos y demás nacieron como herramientas de las que se podía obtener información concluyente en todo tipo de disciplinas: investigaciones científicas, procesos de control de calidad en la industria, epidemiología, evolución en la producción de bienes y servicios de un país, estudios sociológicos, etc.
     
       En lo referente a las llamadas Ciencias Sociales este tipo de herramientas ha sido de gran utilidad y su uso ya se ha hecho extensivo. Gráficos o estadísticas se presentan para que, supuestamente, comprendamos mejor la marcha de la economía, la evolución del mercado laboral y sus tendencias, la intención de voto de la población e incluso sus gustos o aficiones. La carga matemática de dichas herramientas les otorga un aparente empaque científico, de estudio serio y contrastado que autoridades políticas o económicas, e incluso medios de comunicación, emplean para reforzar sus planteamientos o su gestión. Así se demuestra lo que nos presentan. Pero una cosa son las cifras empíricas obtenidas mediante muestreo o recuento (número de personas registradas como desempleadas un mes determinado, opción política por la que se decantan - o dicen decantarse - aquellos a los que se pregunta en una encuesta, cifras porcentuales de aumento o disminución del PIB con respecto al anterior ejercicio...) y otra muy distinta la forma de presentar las conclusiones que de ellas se extraen. Es ahí donde entramos en el terreno de la manipulación de los datos, para utilizarlos con fines propagandísticos o partidistas. Dado que se le presupone cierta seriedad científica a este tipo de herramientas, son armas útiles para convencer a la opinión pública o incluso condicionarla de cara, por ejemplo, a unos comicios próximos. Llegamos al pantanoso terreno de las gráficas manipuladas y el "cocinado" de encuestas.

Comentarios

  1. Totalmente de acuerdo sobre la manipulación en los medios o en la red, por eso debemos comprobar antes de compartir o difundir una notica

    ResponderEliminar
  2. Se debe estar muy seguro antes de compartir cualquier información

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

tus comentarios serán bien recibidos siempre que se hagan desde el respeto y constructivamente. Gracias por tu opinión.